viernes, 30 de octubre de 2009

Fearless I walk
Nameless in the lightness of a shadow
Call my anger in doubt of my rage
Just to beat me once for faith.

I stay
I stand
I believe in humiliation and rawness
In braveness and glory
I believe
I live in
I am shaken and forgot to close my soul

Falling apart I stand in billion of atoms in pieces I stand
I am
I will be
I was.


Camino sin temor
Sin nombre en la levedad de las sombras
Llamad a mi ira en la duda de mi furia
Tan sólo para golpearme una vez por mi fe.

Me quedo
Permanezco
Creo en la humillación y en la frialdad
En la valentía y la gloria
Creo
Vivo en ellas
Soy arrasada y olvido cerrar mi alma

A trozos me deshago en millones de átomos
En trozos en los que permanezco
Soy
Seré
Fui

1 comentarios:

inma dijo...

No debes temer, oh Tasmetú, al camino que hay que recorrer mirando hacia delante y hacia atrás para recordar lo que somos y lo que queremos ser… Camina, camina y corre si es necesario, hacia lo desconocido, pues, ¿quién sabe lo que nos depara el futuro?
Tu ira puede ser tu mejor aliada en los momentos difíciles, pero no una ira desatada, sino una ira pausada que deje paso a la persistencia y la tenacidad, y la fe…
La fe es lo nos permite seguir adelante, creer en que todo va a mejorar, y si no mejora, pues bueno, es lo que nos hace seguir luchando, con determinación y sensatez, de hecho, ya lo dijo una cantautora canaria: “y nunca aprenderé que cuando creo en algo nunca veo la pared, y apuesto por seguir en esta dirección, a veces vienen nubes, pero siempre sale el sol”.
Sí , el sol, la luz, el ver las cosas de otra manera, con otra perspectiva, también eso nos protege del tedio de la vida.
Humillación y valentía y gloria se dan la mano, Tasmetú. Todos sufrimos alguna humillación en la vida, pero tenemos que sobreponernos valientemente, y cuando superamos todos nuestros miedos y todos nuestros fantasmas es cuando alcanzamos la gloria. Todos vivimos lo mejor que podemos, y a veces nos sentimos sobrepasados a cosas, situaciones con las que no sabemos lidiar, en las que, como dices en uno de tus versos, somos arrasados y deshechos en millones de átomos. Pero debemos pensar que, en cada uno de esos pequeños trozos, hay una parte de nosotros, y son muchas partes, y ya se sabe, uno para todos y todos para uno…No dejamos de ser, de existir, pese al presente, al pasado y al futuro.
Personas que nos importan nos acompañan en el camino…
No sé siquiera si habré entendido tus versos, pero me llevan a una reflexión, una reflexión, quizás, un tanto adolescente, pero es mi reflexión al fin y al cabo.
Ya sabes que estoy.

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